Germán Rodríguez, defensor de Centro Social Las Higueras, es actualmente el jugador más longevo de la Liga Regional de fútbol de Río Cuarto. A sus 46 años inició su vigésima octava temporada como parte de un plantel. Repasá el material audiovisual.
Acción Deportiva tuvo la posibilidad de dialogar con Germán Rodríguez, defensor de 46 años que juega en Centro Social Las Higueras y que ha comenzado un nuevo año en la institución azulgrana. “La motivación es que los días de entrenamientos aún tengo ganas de asistir, me siento bien y lo importante es que todavía el técnico de Centro Social me quiere dentro del plantel. Gracias a Dios el cuerpo me ha acompañado bastante bien con el tema de las lesiones, indudablemente el paso del tiempo uno lo siente y va buscando la forma de hacer lo mismo que hacía antes pero de otra manera, me cuido más que antes porque a esta altura ya no puedo regalar nada. Siempre me cuidé mucho, yo siempre digo que he sido un profesional del amateurismo”, expresó Germán sobre las claves para tantos años de actividad futbolística.
Consultado sobre su alejamiento de Estudiantes, manifestó: “No me arrepiento de como se dio mi salida, para mi había un motivo justo. Si con el correr del tiempo, me arrepentí de como fueron las formas. Jorge Sturniolo siempre nos decía, usted cuando se enoje, debe enojarse en serio, no sirve que se enoje todos los días un poquito».
“No volví más a la cancha, hace desde el año 2002 que no voy. Posiblemente cuando deje de jugar al fútbol a lo mejor me llegue, pero eso no quita que tenga la misma relación con la gente de aquel momento y toda la que se ha sumado al club. Inclusive con la persona que tuve el inconveniente, hoy en día tenemos una excelente relación, la herida del pasado cerró, aunque nunca hablamos de ese hecho en particular que sucedió”, agregó.
También el defensor habló de su presente: “En Centro Social hace seis temporadas que estoy, a mí siempre me gustó estar bastante tiempo en los clubes. Me tocó estar mucho en el Atlético San Basilio, en Independiente Dolores y en Sportivo Municipal. Ahora es como que me cuesta cambiar, he tenido la posibilidad de ir a otro lado pero no tengo ganas de empezar a conocer gente nueva. Mi carrera la voy a terminar ahí”.
“Donde me ha tocado estar, me han pasado cosas muy lindas. La verdad que cada club tiene algo distinto e importante, lo mejor son las demostraciones de cariño por parte de la gente de esas instituciones”, aseveró consultado por lo que le ha dejado el paso en cada club.
El último caudillo del fútbol regional hizo referencia a los jugadores más difíciles que le tocó enfrentar: “Antes se jugaba diferente el fútbol ahora ha cambiado mucho. En ese tiempo se jugaba todo el partido mano a mano con el delantero. El «Jote» Oyola era un tipo difícil, el «Chochito» Sosa era otro delantero complicado y mañoso, pero del que yo siempre me acuerdo es de Toscano, un jugador de Concepción de Tucumán, era un grandote que venía del Atlético. Cuando yo jugaba en Estudiantes con él teníamos duelos a morir”.
La familia Rodríguez es muy futbolera y el apellido tiene continuidad con nuevos exponentes de la dinastía. Indagado sobre esto, un padre orgulloso afirmó: “En Centro Social está conmigo Santiago, uno de mis hijos. Jugó todo el año en reserva y a lo mejor este año puede llegar a tener la chance de jugar en primera, se desempeña como defensor central. También tengo a Joaquín que juega en Fusión F.C., él es arquero. Todos los días en mi casa se habla de fútbol, el 90 % de las conversaciones son referidas a eso pero yo los dejo que ellos hagan su propia experiencia y cuando tengan alguna duda que me pregunten. Sería muy lindo compartir un partido con mi hijo, aunque también pienso que no me gustaría compartir todo un año jugando con él, porque yo sé que no se liberaría y no jugaría con tanta tranquilidad”.
Por último Germán Rodríguez hizo alusión a su futuro: “No me pongo plazos, para mi es el día a día. Todo en lo que me voy enfocando es a corto plazo, por la edad que tengo y los compromisos. Hasta acá, pensando de ese modo, pude terminar las últimas cinco temporadas, esperemos que esta no sea la excepción. Por el momento no me llama la atención el rol de técnico, porque hay que dedicarle mucho más tiempo del que se le dedica siendo jugador. Aparte por como vivo el fútbol yo, sería totalmente traumático ser entrenador”.